Hija menor de Vladimir Putin hace rara aparición para hablar de inteligencia artificial
Katerina Tíjonova nació en Dresden en la época en que el presidente trabajó como agente de la KGB en Alemania.
La hija menor del presidente ruso, Katerina Tíjonova, hizo hoy una rara aparición en la televisión pública para hablar de inteligencia artificial, uno de los temas preferidos de su padre, Vladímir Putin.
Tíjonova, de 37 años e identificada por EE. UU. como la hija pequeña del jefe del Kremlin, intervino en directo durante la conferencia internacional en el ámbito del análisis de datos y tecnología, Data Fusion.
El canal de televisión Rossía 24, que ofrece información las 24 horas del día, interrumpió su programación habitual para ofrecer la intervención de Tíjonova.
Según la prensa local, Katerina dirige desde 2013 la Fundación Nacional de Desarrollo Intelectual (Innopráktika), que gestiona contratos multimillonarios desde su cargo en la Universidad Estatal de Moscú, donde es jefa del Centro Nacional de Reserva Intelectual.
Además, desde junio de 2022 es copresidenta del nuevo Consejo de Coordinación de Sustitución de Importaciones e Independencia Tecnológica de la Unión de Industriales y Empresarios de Rusia (RSPP, en ruso).
Vladimir Putin, un "padre orgulloso"
Estados Unidos y la Unión Europea anunciaron en abril de 2022 sanciones contra Katerina y su hermana mayor, María Vorontsova, tras la matanza supuestamente cometida por soldados rusos en la localidad de Bucha, cerca de Kiev.
En 2015, en una de las escasas declaraciones que se le recuerdan sobre sus descendientes, el presidente ruso dijo sentirse "orgulloso" de sus dos hijas.
"Estoy orgulloso de ellas. Yo nunca discuto asuntos relacionados con mi familia. No se dedican ni a los negocios ni a la política. Simplemente viven su vida y lo hace de manera digna", afirmó Putin durante la tradicional conferencia de prensa anual.
Putin se separó en 2013 de su esposa, Liudmila, con la que tiene dos hijas en común: María y Katerina, nacida en Dresde (República Democrática Alemana), donde su padre trabajó como agente del KGB.