20 de marzo de 2025, 16:00 PM

Periodista: David Sibaja.

La lluvia es el peor enemigo de muchos, pero el primer paso para combatir su fuerza es mejorar la vivienda ahora, cuando los rayos del sol aún nos dan una oportunidad. Aunque, seamos honestos, el costo es una barrera: que lo diga Bernarda Caballero, quien hace un mes cambió seis láminas de zinc. Por cada una pagó ¢7.000, pero no pudo pintarlas.

“Para nosotros, las personas sin empleo, es muy difícil. Yo las compré y las dejé sin pintar”, nos dijo Caballero.

Muchas personas reconocen que el verano debería ser el momento ideal para realizar estas mejoras, pero también son conscientes de una realidad: el aumento en los precios de los materiales de construcción.

Por ejemplo, consultamos en varias ferreterías y aquí le damos un precio promedio: una lámina de zinc ondulada de tres metros cuesta ¢9.415. La misma lámina, pero esmaltada en una cara, vale ¢16.000.

Ahora, supongamos que al quitar una lámina se detecta que el tubo está desgastado y necesita ser reemplazado. En ese caso, debe considerar que el tubo estructural de seis metros cuesta ¢11.700 y que cada tornillo para el techo tiene un valor de ¢70.

No olvidemos algo clave: la pintura anticorrosiva. Una cubeta de pintura en aceite cuesta en promedio ¢34.000, mientras que la versión en agua alcanza los ¢54.000.

Por último, aquí un dato adicional: la canoa de PVC lisa tiene un costo de ¢75.000 y el bajante ¢15.000. Así que, asegúrese de revisar bien la suya y eliminar las hojas que puedan dañarla, para evitar gastar esos ¢90.000.

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