POR Rodolfo González | 9 de enero de 2022, 20:37 PM

El apagón educativo y las ideas de cómo combatir sus consecuencias fue uno de los temas medulares del primer debate nacional organizado por el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).

En el debate participaron los candidatos Martin Chinchilla (Pueblo Unido), Greivin Moya (Fuerza Nacional), Welmer Ramos (Acción Ciudadana), Fabricio Alvarado (Nueva República), Carmen Quesada (Justicia Social Costarricense) y Federico Malavassi (Unión Liberal).

Este fue el primer debate de una serie de cuatro que organizó el propio TSE y que continuarán este lunes, martes y miércoles.

Las ideas

Crédito educativo fue uno de los planteamientos realizado por Federico Malavassi. Esta propuesta pretende que los padres de familia reciban dinero directamente del Estado para educar a sus hijos. Así las cosas, cada familia escogería el centro educativo y pagaría la formación con esos recursos.

Carmen Quesada, por su parte, criticó el hecho de que haya estudiantes que no tienen acceso a infraestructura propia del Ministerio de Educación, sino que esta es prestada por iglesias o comunidades, razón por la cual planteó la necesidad de invertir más en edificios propios.

Greivin Moya, de Fuerza Nacional, apuesta por revisar la forma en como se están haciendo las cosas y adecuarlas a las nuevas tecnologías. También criticó que haya tantos centros educativos con orden sanitarias de cierre.

Martin Chinchilla plantea la necesidad de volver a la presencialidad, perdida por la aparición de la pandemia de COVID-19. Además, una capacitación mayor a docentes para mejorar los niveles de educación.

El candidato del PAC, Welmer Ramos,  sugiere cambiar el método de educación para que sea más atractivo. En otras palabras, cambiar la forma en como se enseñan las cosas. 

Fabricio Alvarado propone una reforma educativa que prepare a los estudiantes en áreas más destinadas a matemáticas y tecnologías, así como fomentar educación financiera e inglés.

Combate a la corrupción

Otro tema que se analizó fue el combate a la corrupción.

En este punto, Fabricio Alvarado y Welmer Ramos coinciden en digitalizar todos los procesos relacionados con contrataciones y compras públicas.

Malavassi también apunta a esa mayor transparencia en procesos de compra, pero añade que se atacar el problema desde la educación y cultura ciudadana.

Martin Chinchilla señaló que una de las medidas debería ser la mayor protección a los denunciantes.

Carmen Quesada consideró que debe de existir cero impunidad en casos de corrupción y que no puede haber casa por cárcel para los responsables de estos hechos.

Greivin Moya opina que se debe modificar la ley de control interno para que tenga "mayor músculo", así como rotar las proveedurías de las instituciones.