Por Julio Naranjo |6 de diciembre de 2019, 12:12 PM

El Hospital Guardia logró un nuevo hito a nivel médico que beneficia a aquellos pacientes que se encuentran a la espera de un trasplante de corazón.

El pasado 28 de noviembre se convirtió en el primer centro médico de la región centroamericana en realizar la colocación de un dispositivo de asistencia ventricular de larga duración.

Este es un aparato con una centrífuga que permite la circulación de la sangre haciendo una función de puente en uno de los ventrículos que se encuentran dañados en el corazón.

Dicho dispositivo fue instalado en José Adrián Vargas, paciente de 36 años vecino de Calle Blancos, el cual presenta una miocardiopatía dilatada, la cual le provocaba frecuentes descompensaciones por insuficiencia cardiaca. 

A él se le instaló una pieza que sustituye el ventrículo izquierdo, que es una de las cuatro cavidades que tiene el corazón, el cual se encarga del bombeo de la sangre rica en oxígeno al resto del cuerpo.

"Estoy volviendo a vivir. Yo sin esto quién sabe desde hace cuánto tiempo habría muerto, quien sabe cuantas misas me habrían pagado. Anhelo volver a estar con mis hijos y mi esposa, llevar una vida normal", mencionó Vargas, quien antes se desempeñaba como salonero. 

Expertos señalan que el paciente, quien permanece en la lista de espera de trasplantes, recibió el tratamiento médico máximo sin grandes resultados, al punto que inició el deterioro de otros órganos como riñón e hígado.

Esa condición lo apartaba como candidato para recibir el trasplante, por lo que optaron por la instalación del novedoso dispositivo que le permite esperar hasta el momento que encuentre el corazón de un donante. 

“La idea es brindar al país un centro de atención de la más alta complejidad que permita llevar las patologías cardiacas y pulmonares por todas las etapas posibles de apoyo a ese corazón del paciente para que logre en su momento, si son candidatos apropiados, una solución definitiva de su problema como lo es un trasplante”, comentó el Dr. Jorge Arturo Rodríguez, uno de los encargados del procedimiento.

El especialista agrega que al paciente se le brinda mejor calidad de vida, con una mayor libertad y no atado a una máquina, ya que puede volver a la casa con sus familiares e incluso retomar las obligaciones laborales.

“En otro momento este paciente habría fallecido”, señaló el gerente médico de la Caja Costarricense de Seguro Social, Dr. Mario Ruíz.

El primer trasplante de corazón en Costa Rica fue realizado el 8 de marzo de 1991 por el Dr. Longino Soto en el Hospital México.