Por Julio Naranjo |19 de noviembre de 2019, 16:42 PM

La Dirección de Infraestructura y Equipamiento Educativo (DIEE) solo ha podido ejecutar 55 de los 103 proyectos nuevos o de ampliación en centros educativos que pretendía financiar con el Fideicomiso del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por un monto de $167,5 millones.

Así lo aseguraron representantes del Ministerio de Educación Pública (MEP) en audiencia ante los diputados de la Comisión de Juventud, quienes investigan el contexto actual de la DIEE para atender el rezago en temas de infraestructura a nivel nacional.

Carlos Alberto Rodríguez, asesor del viceministerio educativo del MEP, señaló que a la hora de ejecutar los fondos a partir del 2015 se enfrentaron a una realidad diferente en cuanto al presupuesto específico de cada una de las obras.

“Se establecieron 103 proyectos, pero no se hizo a la realidad sino con una estimación por metro cuadrado. Por ejemplo, hay algunas instituciones que requieren obra vertical y requiere mayor presupuesto”, señaló Rodríguez.

Por eso imploran ante los diputados la aprobación de un proyecto de ley para financiar $138 millones más para cubrir las 48 obras restantes.

Reorganización

Durante la comparecencia la ministra de Educación, Giselle Cruz, reveló las deficiencias identificadas en la DIEE que impiden agilizar la ejecución de proyectos a nivel nacional.

La jerarca destacó que un diagnóstico realizado durante los últimos meses arrojó una serie de hallazgos importantes con los que el MEP planteará la nueva reorganización del DIEE ante el Ministerio de Planificación Nacional y Política Económica (MIDEPLAN).

“El objetivo de la reorganización es optimizar el proceso de atención de necesidades en infraestructura, la compra de terrenos y el equipamiento de los centros educativos”, mencionó Cruz.

Argumenta que actualmente la DIEE atiende las necesidades de los 4.441 centros educativos públicos en el país, de los cuales se estima que cerca de 2.000 requieren alguna intervención en el tema de infraestructura.

“Encontramos una DIEE reactiva, que responde a las Juntas de Educación o a las comunidades en particular, con poca o nula articulación con la Dirección de Planificación Institucional y con el Departamento de Juntas de Educación del MEP, así como poca articulación con las direcciones regionales”, acotó.

Por eso plantearán un modelo en el que se diferencien las obras mayores de obras menores para que liberar a la DIEE de la aprobación de todos los proyectos y darles la oportunidad a las juntas educativas de ejecutar algunos trabajos.

“Es como el Canal de Panamá, por ahí pasan desde los cruceros hasta una panga, es decir, por la DIEE pasan desde los procesos de contratación de obra mayor, obra menor y hasta contratación para obras de mantenimiento”, señala Cruz.

Precisamente el tema de mantenimiento es uno de los más críticos tras el diagnóstico, pues descubrieron que ni la DIEE ni las Juntas de Educación estiman presupuesto para la atención preventiva de las diferentes infraestructuras.

“Tampoco existe un macroproceso en la DIE donde se indique desde que inicia una obra de infraestructura hasta que termina, ya que actualmente se realizan por medio de expedientes en formatos físicos que van de una oficina a otra de manera diferenciada”, concluyó.

Parte de los cambios que se presentarían a MIDEPLAN sería establecer rutas de trabajo y cronogramas, así como digitalizar el expediente de cada uno de los proyectos.

La gestión de la DIEE, la cual fue creada en el 2017, ha sido un órgano muy cuestionado debido a la burocracia que enfrenta para la ejecución de los proyectos de infraestructura, situación que pretenden solucionar con este reacomodo.