Por Juan Manuel Quirós Cavallini |9 de octubre de 2019, 12:27 PM

Estudio de la Universidad Nacional deja en evidencia que, por más esfuerzo del gobierno, el consumo de las familias costarricenses sigue estancado.

Esta realidad es más evidente en los últimos dos años y medio, donde se ve como el endeudamiento de los costarricenses toca techo y esto frena la capacidad de consumo.

La deuda del tico no solo crece en bancos sino también en casas de empeño, prestamistas informales, endeudamiento en comercios para adquirir artículos para el hogar, planes para adquirir planes móviles que impactan el bolsillo de la gente con sus altas tasas de interés.

En la actualidad no hay señales de que este consumo se haya reactivado pese a medidas anunciadas por el gobierno para dinamizar la economía nacional.

Una prueba de lo anterior se ve reflejado en el freno en la venta de vehículos nuevos, electrodomésticos, importación de bienes, entre otros.

La complejidad del tema está en un círculo vicioso que se debe romper y en el cual están involucrados el desempleo, el alto costo de la vida, competitividad del país, tasas de intermediación bancaria altas y baja educación financiera de las personas.

El estudio completo usted lo puede consultar en el Facebook del Observatorio Económico y Social de la Universidad Nacional.