Por Susana Peña Nassar |19 de abril de 2018, 11:28 AM

A casi dos meses de la cirugía que separó a los pequeños Samuel y Ezequiel la condición estable permite a los papás tener más contacto físico con los niños, que nacieron unidos por su cabecita en el 2015.

Los gemelos de dos años avanzan positivamente.

Evelyn y Stallin, los papás de los menores, se turnan para estar con ambos bebés, ya que sus habitaciones están una al lado de la otra.

Agradecen las oraciones y las muestras de cariño que han recibido durante este largo proceso y anhelan, muy pronto, poder regresar a casa con sus hijos.

Valga recordar que tras la operación principal, Samuel fue intervenido en dos ocasiones más por complicaciones.

Los menores fueron intervenidos el viernes 23 de febrero a las 7:30 de la mañana.

La cirugía concluyó el sábado a las 2 de la madrugada, casi 20 horas de una labor titánica que involucró neurocirujanos, cirujanos reconstructivos, anestesiólogos, auxiliares de sala, circulantes, enfermeras, instrumentistas, personal de aseo, entre otros.

Esta cirugía se planificó hace dos años y mediaron consultas tanto a médicos nacionales como a expertos internacionales; estos últimos consideraron que la intervención tenía una gran dificultad.

Durante la separación, Samuel y Ezequiel recibieron diez litros de sangre: lo equivalente a 40 donadores.